La izquierda andaluza está lista para arrancar la precampaña de las elecciones autonómicas, que se celebrarán como muy tarde en junio del próximo año. Sin embargo, lo harán sin la presencia de Podemos, que ha decidido priorizar su estrategia a nivel doméstico y relanzar a su candidata, Irene Montero, como la alternativa a los partidos que actualmente forman parte del Gobierno.
La coalición Por Andalucía, formada por Izquierda Unida, Movimiento Sumar e Iniciativa del Pueblo Andaluz, ha reeditado su alianza para estas elecciones, pero sin la participación de Podemos. A pesar de esto, la izquierda andaluza no se detiene y ya tiene planes para un gran acto en septiembre, con el objetivo de iniciar la precampaña con fuerza.
Una de las principales incógnitas que rodea a este acto es si para entonces ya habrá un aspirante definido que se enfrente a Juanma Moreno en las urnas. La idea es buscar una figura de consenso entre las distintas fuerzas y tener el nombre sobre la mesa para poder arrancar el curso político en septiembre. En caso de no concurrir a un acuerdo, ya existe un documento de primarias elaborado por IU y que está siendo objeto de negociación entre el resto de fuerzas, para que en caso de ser necesario, los distintos aspirantes puedan competir en una votación. La creación del censo para estas posibles primarias y el desarrollo del proceso electoral son algunos de los temas que están siendo discutidos por los partidos integrados en Por Andalucía, pero Podemos ha decidido mantenerse al margen de estas negociaciones.
En un principio, IU había establecido junio como plazo máximo para lanzar la candidatura y comenzar la precampaña con ciertas garantías. Sin embargo, Podemos siempre ha rechazado esta fecha, argumentando que no se ajusta a sus tiempos. Desde IU atribuyen este rechazo a la prioridad que Podemos ha dado a su estrategia a nivel doméstico, donde mantienen una disputa abierta con Sumar y los partidos que la integran, con el objetivo de posicionar a Irene Montero como la líder de la izquierda alternativa. Esta postura ha sido impuesta por la dirección estatal de Podemos y contrasta con la buena relación que existe con los tres diputados morados en el Parlamento de Andalucía.
Las negociaciones para reeditar la candidatura Por Andalucía llevan meses en marcha. A pesar de que los dirigentes andaluces de Podemos han mostrado su sintonía con IU, con quien comparten grupo parlamentario, lo algún es que la postura de la cúpula morada ha condicionado fuertemente la situación. La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha condicionado cualquier acuerdo en Andalucía a la salida de IU del gobierno de coalición debido al debate sobre el gasto militar, en línea con su prioridad de establecer una alianza a nivel doméstico antes que cualquier pacto a nivel regional.
La relación con los tres diputados de Podemos se mantiene en estos momentos dentro de la normalidad. En las filas de Podemos Andalucía, coordinado por Raquel Martínez, hay sectores más duros que se oponen a cualquier acuerdo con IU, como los representados por Susana Hornillo o el diputado Juan Antonio Delgado. Sin embargo, el resto de perfiles han evitado hasta el momento romper todos los puentes.
El acto que se celebrará en septiembre contará con la participación de perfiles independientes de la sociedad andaluza y dejará en evidencia la soledad de Podemos en el escenario electoral. Desde Por Andalucía desconfían de que los morados levanten el veto a la candidatura y se acerquen solo en el último momento, repitiendo la misma situación que en las elecciones de 2022