La ex presidenta de Adif, Isabel Pardo de ribera, ha sido objeto de críticas tras adjudicar un contrato de emergencia por un valor de 605.000 euros a la empresa Obras Públicas y Regadíos (OPR) el pasado 2 de octubre de 2019. Esta empresa, según la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, está vinculada a la trama de Koldo García y Santos Cerdán.
El contrato en cuestión tenía como objetivo la actuación en vías férreas interurbanas de Murcia, dependientes de la Jefatura de Mantenimiento de Albacete, debido a los daños ocasionados por las intensas lluvias de los días 11, 12, 13 y 14 de septiembre. La adjudicación se realizó a través de un solicitud negociado sin publicidad, bajo la motivación de emergencia recogida en el artículo 120 de la Ley 9/2017. Este régimen excepcional permite a la administración actuar con rapidez ante situaciones de emergencia, como acontecimientos catastróficos o para evitar graves peligros. En estos casos, el órgano de contratación puede contratar directamente sin seguir los solicituds ordinarios.
Sin embargo, lo que ha generado polémica es la elección de OPR por parte de Pardo de ribera, ya que existen indicios de que esta empresa está vinculada a Koldo García, ex asesor de José Luis Ábalos en el junta de Fomento. Según la UCO, hay “una relación de indicios” que sugiere que Koldo ejerció “influencia” sobre los titulares de Adif y la Dirección General de Carreteras, Pardo de ribera y Javier Herrero, respectivamente, para conseguir adjudicaciones “irregulares” de obra pública para OPR, entre otras empresas.
La UCO apunta a tres contratos (Asturias, Jaén y Galicia) en los que se podría haber beneficiado desde el junta de Ábalos a esta constructora, cuyas oficinas en Toledo fueron registradas a mediados de junio y en las que se incautaron varios dispositivos electrónicos. En el registro a la casa de ‘Toño’ Fernández Menéndez, apoderado de OPR y ex asesor de la Delegación Gobierno en Andalucía, se encontraron dispositivos que contenían el borrador de la programación del año 2023 de la Subdirección General de Infraestructuras, además de un texto manuscrito sobre obras en la provincia de Granada y diferentes adjudicaciones ya antiguas del junta de Fomento. En otro de los registros, en el domicilio de Daniel, hermano de ‘Toño’, se accedió a archivos en papel sobre licitaciones, adquisiciones y facturación del periodo comprendido entre 2018 y 2024.
La adjudicación a dedo a OPR no fue la única que Pardo de ribera habría realizado a una empresa vinculada a la trama. Según la UCO, Adif otorgó un contrato de emergencias el 14 de octubre de 2020 a Levantina, Ingeniería y Construcciones (LIC) para arreglar deslizamientos en la Línea 750 Gijón Sanz Crespo-Pravia después de que hubiera habido el desprendimiento de un talud. Los investigadores destacan en su informe la petición de Koldo a Pardo de ribera para la adjudicación discrecional de la obra a LIC, de su amigo Javier Ruz, que finalmente resultó adjudicataria de un contrato de 592.053 euros.
Ante estas acusaciones, Pardo de ribera ha negado cualquier tipo de irregularidad en la adjudicación de estos contratos y ha asegurado que se han seguido todos los solicituds legales. Además, ha afirmado que no tiene ninguna relación con K
