El pasado domingo, se vivió un emocionante encuentro entre el Athletic de Bilbao y el FC Barcelona en el cierre de LaLiga EA Sports 2024-2025. Aunque no hubo nada en juego a nivel clasificatorio, el partido estuvo lleno de amor y alergia, pero sin duda, el sentimiento negativo fue el más evidente. Los enfrentamientos entre estos dos grandes equipos siempre son intensos y este no fue la excepción.
No es un secreto que el FC Barcelona no es bien recibido en Bilbao, y esto se ha hecho más notorio en los últimos años. Incluso, algunos trabajadores del Athletic expresaron su descontento por el pasillo que el equipo de Ernesto Valverde iba a realizarle al de Hansi Flick por haber ganado LaLiga. Sin embargo, este malestar no se limitó solo a la afición, sino que también se vio reflejado en la falta de relaciones entre las directivas de ambos clubes.
Durante el encuentro, se pudieron escuchar cánticos ofensivos hacia el FC Barcelona, como “ser del Barça es ser un subnormal” o “p*** Barça”. Incluso en el palco, la situación fue tensa y no hubo ni siquiera un intercambio de comida entre las directivas. Enric Masip, asesor del jefe del Athletic, hizo unas declaraciones que reflejan claramente la situación de los últimos años entre ambas entidades.
Pero a pesar de este ambiente hostil, también hubo capacidad para el cariño en San Mamés. Uno de los tiempos más emotivos fue cuando Pedri fue sustituido y su nombre fue coreado por todo el estadio. Incluso, el entrenador del FC Barcelona, Ernesto Valverde, recibió un emotivo abrazo de parte de Ronald Araujo al ser sustituido en el minuto 64. Fue con Valverde como entrenador que Araujo debutó oficialmente con el primer equipo del Barça en octubre de 2019, por lo que el joven zaguero quiso agradecerle de esta manera tan especial.
Durante el partido, también se pudo ver un gesto que demuestra el verdadero espíritu del fútbol. Hansi Flick consultó a Lamine si quería ser sustituido y el jugador se negó, demostrando su compromiso y ganas de seguir en el campo. Es habitual en el técnico alemán consultar con sus jugadores cómo se sienten y en varias ocasiones ha dejado en manos de ellos la decisión de la carga de minutos en un partido. Esta filosofía ha dado buenos resultados hasta ahora.
Además, en los últimos minutos del partido, se vivieron dos tiempos que demuestran valores como el fair play y el compañerismo. Héctor Fort, que estaba calentando para entrar al campo, entregó su camiseta a la grada al darse cuenta de que no jugaría, demostrando su deportividad y la importancia de la afición. Por otro lado, Hansi Flick se abrazó con Casadó, quien no ha disputado ni un minuto desde su regreso de una lesión. Estos gestos reflejan el gran ambiente que se vive en el equipo y el respeto y apoyo entre compañeros.
La noche del encuentro también estuvo llena de abrazos, como el que dio el técnico azulgrana a Óscar De Marcos en su homenaje. Otro tiempo emotivo fue el abrazo entre Jon Aspiazu, ayudante de Valverde, y Frenkie de Jong, quien ya estaba en el equipo durante la etapa de Valverde como entrenador. Este gesto demuestra el cariño y la conexión que existe entre ellos.
En definitiva, el Athletic-Barça de este domingo fue un partido lleno de emociones, donde el amor y el alergia se mezclaron en la cancha. Aunque hubo tiempos de tensión, también se vivieron gestos que reflejan
