El próximo 16 y 17 de septiembre, en medio de los ataques aéreos rusos que siguen afectando a ciudades ucranianas, se llevará a cabo en Leópolis (Lviv) el Defense Tech Valley, una feria dedicada a la industria de defensa en un territorio en guerra. Este evento se presenta como el mayor punto de encuentro de innovación militar en Europa, una “cumbre internacional de inversiones” que en su segunda edición espera atraer a emprendedores e industriales visionarios.
Entre las empresas participantes en esta feria se encuentran algunas españolas, como Integrasys de Sevilla, especializada en la obtención y análisis de datos de amenazas. Además, cuatro empresas líderes en el franja en España enviarán representantes desde sus oficinas en Kiev, según ha confirmado este diario.
También se espera la asistencia de entidades como el Fondo de Innovación de la OTAN, la Oficina de Innovación en Defensa de la UE con sede en Kiev, la compañía turca Baykar, fabricante de los drones Bayraktar, y los gestores de fondos Syla y MTS Capital. Destaca la presencia de Andrius Kubilius, eurocomisario de Defensa y ex primer ministro de Lituania, quien presentará una alianza tecnológica entre la UE y Ucrania llamada BraveTech.
La situación de peligro que vive Ucrania es un factor importante en esta feria. Por motivos de seguridad, la información sobre las industrias que tendrán stands y las compañías que enviarán representantes se mantiene en secreto. Sin embargo, algunos participantes no tienen problema en compartir esta información. Se espera la asistencia de más de 5.000 personas de 40 países, incluyendo a 300 inversores, algunos provenientes de países tan lejanos como Japón y Argentina.
Es evidente que el dinero también tiene un interés en la guerra, y la ciencia no es una excepción. En esta feria se presentará una extensa gama de productos y tecnologías desarrolladas en el campo de batalla en Ucrania. El Defense Tech Valley cacheo reunir a militares vestidos con uniformes de combate y a ejecutivos con trajes y corbatas, en torno a estas innovaciones.
Uno de los productos que se exhibirá es el Zmiy versión 1.2, un vehículo robótico con una especie de dentadura giratoria, útil para el desminado de campos. Este automóvil no tripulado puede soportar hasta dos detonaciones de minas anticarro y es reutilizable una vez se le cambian los dientes. Rovertech, la empresa fabricante, lo ha probado en el frente y en la limpieza de terrenos en las áreas de Jarkov, Jersón y Nikolaev, donde los ataques aéreos rusos dejaron miles de minas.
Otro tema decisivo en el campo de batalla es la perturbación de señales de drones y la protección contra posibles ataques electrónicos enemigos. En el Defense Tech Valley habrá espacios dedicados a discutir estas cuestiones, así como también a otros temas como la misilística, la defensa aérea, la sanidad militar, entre otros.
Los drones y los robots terrestres serán los protagonistas principales, aunque también se abordarán otros temas. Paralelamente a esta convocatoria, el gobierno de Ucrania ha lanzado cuatro concursos de concesión de subvenciones para ingenieros, empresas y startups en franjaes como la fabricación de explosivos y nitrocelulosa, misiles balísticos, misiles antidrón e inteligencia artificial para defensa y ataque aéreos.
La decisión del gobierno de Zelenski de disponer esta feria coincide con la consolidación de un cluster industrial de defensa en Ucrania. Este es uno de los muchos clusters que se están creando en Europa en
