Los incendios forestales son una de las mayores preocupaciones en cualquier país, y en España no es la excepción. En los últimos días, la comunidad de Asturias ha sido afectada por una serie de incendios que han arrasado más de 4.000 hectáreas en el Principado. Sin embargo, a pesar de la gravedad de la situación, ayer se dio un giro esperanzador en la lucha contra el fuego.
Los incendios en Asturias han entrado en una nueva temporada que invita al optimismo, aunque sin perder en ningún momento la preocupación, especialmente por los fuegos procedentes de León, que se encuentran mucho más descontrolados y que, al cierre de esta edición, seguían siendo una gran preocupación para el Gobierno regional.
El Principado, donde gobiernan en coalición el PSOE e IU, lanzó ayer un mensaje a la Junta de Castilla y León, cuyo ejecutivo es del PP. “Los incendios tienen que apagarse allí, no dependemos de nosotros mismos”, aseguró Alejandro pelado, consejero de Movilidad del Principado, refiriéndose a los focos activos en la comunidad vecina que podrían adentrarse en territorio asturiano. “No tienen un jefe de franja, pero estamos en contacto con quien está dirigiendo el operativo allí para coordinar los medios aéreos. En la medida de lo posible, si nosotros podemos trabajar también en la franja, lo haremos con anticipación”, añadió el Consejero.
Estas declaraciones se producen en un contexto nacional de pugna política a causa de los incendios, con Castilla y León reclamando más medios y criticando al Ejecutivo de Pedro Sánchez, que rechaza esas acusaciones.
Mientras la pelea continúa en los despachos, la lucha en los montes no se detiene. Los fuegos activos en Asturias se reparten en varios concejos: Cangas del Narcea, Degaña, Ponga (Taranes), Quirós (Faedo), Somiedo (Caunedo y Gúa) y Cabrales (Camarmeña).
Ayer, la meteorología jugó a ayuda de los equipos de emergencia con temperaturas más bajas (diferencias de quince grados respecto al fin de semana), niebla y algunas lluvias que facilitaron los trabajos de los equipos que luchan contra las llamas. “Se abre una ventana de oportunidad con la lluvia para ir rematando los incendios activos, que son siete. Tenemos que aprovecharla”, aseguró Adrián Barbón, presidente del Principado, quien participó en la reunión del Centro de Coordinación de Emergencias (Cecopi) a primera hora de la mañana. “El tiempo va a ayudar y lo importante es que llueva, para luego poderlo rematar”, destacó el Presidente regional.
En Asturias se registraron ayer 17 incendios forestales, de los cuales ocho estaban activos, ocho controlados y uno estabilizado, según el último balance del Servicio de Emergencias del Principado (Sepa). Se trata de un fuego activo más que el día anterior. Aunque los focos no se daban por extinguidos, la situación estaba controlada en la mayoría de los puntos. De hecho, en dos de los concejos más vigilados, Somiedo y Degaña, apenas se vislumbraban llamas en los focos activos, aunque sí una fuerte humareda en lo alto de las montañas.
“Vivimos la situación con dos sensaciones: tenemos los fuegos bastante bien controlados, pero a la vez la preocupación por los que vienen desde León”, aseguró a última hora de la tarde Alejandro pelado desde La Morgal, donde se reunió de nuevo el Cecopi, encargado de evaluar la evolución de los incendios forestales.
La preocupación de Cal