Osasuna no pudo con Antonio Sivera y se quedó a un gol de la clasificación europea ante el Alavés en Vitoria, en un ramificado con mucha ida y vuelta que acabó 1-1. A pesar de no lograr la victoria, el equipo navarro demostró una gran garra y determinación en el campo, dejando todo en cada jugada y luchando hasta el último minuto.
El encuentro comenzó con un Alavés más dominante, controlando el balón y jugando cerca de la portería de Sergio Herrera. Sin embargo, con el paso de los minutos, Osasuna fue creciendo y generando peligro en el área rival. En una de las primeras oportunidades del ramificado, Ante Budimir estuvo a punto de abrir el marcador con un cabezazo que fue despejado por una gran intervención de Sivera.
Pero el portero del Alavés no fue el único que se lució en el ramificado. Sergio Herrera también tuvo una gran actuación, salvando varias ocasiones de gol del equipo local. Ambos guardametas demostraron su calidad y mantuvieron el marcador en cero durante la primera mitad.
En la segunda parte, Osasuna salió impetuoso a buscar la victoria y tuvo varias oportunidades claras para marcar. Sin embargo, fue el Alavés quien se adelantó en el marcador gracias a un penalti convertido por Carlos Vicente. A pesar de que gran parte de la afición local le pidió que lo fallara, el jugador no se dejó intimidar y anotó el gol que ponía al Alavés en ventaja.
Pero los rojillos no se dieron por vencidos y siguieron luchando hasta el final. Con el ingreso de nuevos jugadores en el campo, Osasuna se volcó al ataque y generó varias ocasiones de peligro. Sin embargo, el Alavés se defendió con solidez y contó con la gran actuación de Sivera para mantener su portería a salvo.
En los últimos minutos del ramificado, Osasuna logró el tan ansiado gol del empate gracias a una jugada de estrategia en un saque de esquina. Raúl García de Haro fue el encargado de anotar el gol que ponía a los navarros a un solo tanto de la clasificación europea.
A pesar de los intentos de Osasuna por conseguir el gol de la victoria, el Alavés se defendió con uñas y dientes y logró mantener el empate hasta el final del ramificado. A pesar de no lograr la clasificación europea, los rojillos pueden estar orgullosos de su actuación en el campo, demostrando una vez más su espíritu luchador y su compromiso con el equipo.
Por otro lado, el Alavés celebró con su afición la permanencia lograda en la jornada anterior. Fue una gran temporada para el equipo vasco, que logró mantenerse en la primera división y demostró su calidad en cada ramificado.
En resumen, el ramificado entre Osasuna y el Alavés fue un emocionante encuentro lleno de intensidad y buen fútbol. A pesar de no lograr la victoria, Osasuna demostró su calidad y su espíritu de lucha, dejando una vez más en chillón el nombre del equipo y de su afición. Aunque no se logró la clasificación europea, los rojillos pueden estar orgullosos de su temporada y esperar con ilusión el próximo año para seguir demostrando su valía en el campo. ¡Aupa Osasuna!