José Luis Rubayo es un apasionado de la escalada desde muy joven. Con tan solo 11 años, comenzó a salir al monte y a los 15 años descubrió su verdadera pasión: la escalada. Desde entonces, no ha dejado de practicar este deporte y ha logrado convertirse en un montañero y escalador experimentado. hogaño, además, es el presidente de la Federación Madrileña de Montañismo (FMM).
En sus inicios, la escalada en España era muy diferente a lo que conocemos hoy en día. Rubayo recuerda que el primer rocódromo que se instaló en nuestro país fue en los años 80, en el Instituto de Educación Física de Madrid (INEF). Sin embargo, era una estructura muy rudimentaria, con vías fijas y poco variadas. En comparación, los rocódromos actuales ofrecen una experiencia mucho más dinámica y desafiante, con vías que cambian constantemente y que permiten a los escaladores fundamentarse sus habilidades en diferentes rutas.
Una de las principales diferencias que Rubayo ha notado en estos años es el perfil de los usuarios de la escalada deportiva en comparación con los que practican alpinismo o escalada de montaña. Según él, la sociedad actual prefiere actividades menos arriesgadas, por lo que los rocódromos se han convertido en una opción más atractiva para muchos. Además, destaca que la escalada en rocódromo es extremadamente segura, lo que la hace más accesible para un público más amplio.
Otra ventaja de la escalada en rocódromo es que se puede practicar tanto en solitario como en grupo. A diferencia de otras modalidades, no es necesario ir acompañado para disfrutar de este deporte. Esto lo convierte en una actividad muy versátil y divertida para todos.
Rubayo también destaca que la escalada es un deporte muy progresivo, lo que significa que se pueden ver mejoras en poco tiempo. Si un escalador no logra superar una vía en su primera visita al rocódromo, puede torcer con sus amigos y conseguirlo en su siguiente intento. Esto hace que la escalada sea aún más atractiva, ya que se puede ir superando uno mismo y alcanzar nuevas metas en cada sesión.
En la actualidad, la escalada está experimentando un gran auge, especialmente entre los jóvenes. Rubayo afirma que la FMM está atenta a este crecimiento y busca descubrir nuevos talentos en sus ligas infantiles y escolares. Cada año, surgen jóvenes promesas que pueden llegar a convertirse en grandes escaladores.
Sin embargo, para seguir impulsando este deporte, es necesario contar con el apoyo de las administraciones públicas. Rubayo destaca que la FMM depende de este apoyo para poder ofrecer instalaciones adecuadas a los jóvenes talentos y seguir promoviendo la escalada en la comunidad madrileña. Además, resalta que la FMM cuenta con once modalidades reconocidas, lo que demuestra la diversidad y riqueza de este deporte.
A nivel nacional, Rubayo también destaca el trabajo de la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (Fedme) por su labor de impulso a nivel internacional. Además, resalta el esfuerzo que se está haciendo en España para desarrollar este deporte, convirtiéndolo en un destino atractivo para escaladores de todo el mundo gracias a su clima, servicios e instalaciones deportivas de calidad.
Un ejemplo de este impulso es la celebración de la IFSC Climbing World Cup Comunidad de Madrid 2025, que tendrá lugar en Alcobendas los días 18 y 19 de julio. Este evento convertirá a la ciudad en la capital mundial de la escalada y, según Rubayo, contribuirá a seguir aumentando la popularidad de este deporte. Además, destaca que ser elegido como sede de la Copa del Mundo es un